Ahora ya sabían quien era aquella niña de 8 años que desapareció hace casi 80 años…
Nunca encontraron su cuerpo, fue como si se la hubiera tragado la tierra.
– Cuanto antes acabemos con esto mejor – dijo Aitana.
– Tenemos que ir al cementerio, estoy segura de que allí tiene que estar la respuesta o habrá algo que nos guíe sobre lo que debemos hacer – comentó Daniela.
Judy apenada por todo lo que habría vivido aquella niña suspiró – Vamos ayudarte Becky Jhonsson… Prometo que volverás a estar con tu familia.
Dieron media vuelta y regresaron por aquel pasillo oscuro hasta que consiguieron ver el agujero al fondo. Habían logrado salir de allí sanos y salvos, los padres de Judy seguían abajo viendo la tele, ahora sin llamar la atención tenían que dirigirse a el cementerio de Strayfield Road.